Bloomberg — El Banco Mundial (BM) advierte de que incluso una pequeña interrupción del suministro de crudo debido a la escalada del conflicto en Medio Oriente podría retirar de los mercados mundiales entre 500.000 y 2 millones de barriles diarios.
Si esto ocurriera, los precios podrían subir hasta entre 93 y 102 dólares por barril, según un informe publicado el lunes. Las perspectivas podrían “oscurecerse rápidamente” si el último conflicto amplía su alcance, con una perturbación de tamaño medio de entre 3 y 5 millones de barriles diarios que elevaría los precios hasta 121 dólares el barril.
La mayor interrupción potencial prevista por el banco podría eliminar de 6 a 8 millones de barriles de petróleo al día, comparable en magnitud al embargo petrolero árabe de 1973. En el peor de los casos, los precios podrían alcanzar los 157 dólares por barril.
Hasta ahora, la guerra entre Israel y Hamás ha tenido un impacto mínimo en el mercado del petróleo, lo que “puede reflejar la mayor capacidad de la economía mundial para absorber las perturbaciones del precio del petróleo”, según el informe. La crisis energética de los años 70 llevó a muchos países a reforzar sus defensas contra la volatilidad de los precios reduciendo su dependencia del petróleo, explotando recursos energéticos ampliados y estableciendo reservas estratégicas de petróleo, entre otras medidas.
Según la previsión de referencia del Banco, los precios del petróleo se situarán en una media de 90 dólares el barril en el trimestre actual, antes de descender a una media de 81 dólares el barril el año próximo, en un contexto de retraso del crecimiento económico mundial. Se prevé que los precios globales de las materias primas caigan un 4,1% el año próximo antes de estabilizarse en 2025.